“Raúl Henao, el hombre que camina las tardes por el centro de Medellín llevando poemas en los brazos, el que vive y respira por este lado del jardín del mundo al que se ha sujetado con empeño y amaño, esta ciudad a la que le ha escrito sus cantos y con quien también se ha enojado, la que ahora lo rechaza también sin saberlo”, así, con respeto y admiración, resume Diego Alexander Gómez la vida y obra de Raúl Henao, uno de los poetas mayores de Medellín.
Y continúa Gómez su sentido relato: “Pero él vive tranquilo su vida, en sus pasos de místico religioso, junto a sus amigos los libros, maestros y compañías que dan la luz a su pensamiento, su Sol negro, su Doble estrella”.
Realizador audiovisual y también poeta, Gómez decidió contar la vida de Henao en imágenes y, tras cuatro años de caminar junto a él con cámara en mano (proyecto que en principio no convenció del todo al poeta, aunque después terminó siendo parte del mismo), presenta El músico escondido (retrato audiovisual de un poeta), documental que retrata a Henao a través de sus libros, sus búsquedas y su cotidianidad.
“Empezamos a tener unos encuentros cada ocho o quince días, yo lo visitaba o nos encontrábamos en un bar o un café, para conversar y preguntarle sobre su vida. Ahí fue saliendo todo lo que se ve en el documental, yo le pregunto sobre su vida, su poesía y el surrealismo, y a medida que vamos conversando y nos vamos encontrando, se da esa parte cotidiana donde uno puede ver a un Raúl más abierto a las cámaras, sin pena y más libre a expresar lo que quiere”, recuerda Gómez el rodaje del documental y agrega que, al momento de seleccionar y montar el material grabado, siempre contó con la opinión de Henao para lograr un documental que los dejara satisfechos a ambos.
Sin artilugios y con la mirada atenta del documentalista, Gómez logra mostrar a Raúl Henao en su faceta más íntima (mirando libros por el Pasaje Junín mientras recuerda su inquieta juventud, tomando vino al calor de los buenos amigos y del tango o regocijado con la tranquilidad del campo), pero también al poeta de alto vuelo que fundó revistas y escribió varios libros, o al profesor que ha visto crecer a sus alumnos a través de los versos que escriben con esmero.
“Más que mostrar su obra, sus diferentes libros, sus viajes por el mundo o sus participaciones en festivales de poesía, yo quería mostrar el hombre que es ahora Raúl Henao: un hombre común y corriente, como todos, tranquilo, que va y viene por la vida, que camina por la ciudad con el recuerdo y llevando el tango en la sangre, en su nostalgia, llevando esas calles de la literatura en su juventud, recordando las revistas que sacaron, sus libros, los amigos. Yo creo que es toda esa historia de lo que ha sido la vida de Raúl frente a la literatura y al mundo, un poco la intimidad de su casa, un poco lo que él piensa, y obviamente sin perder de lado la poesía”.
Entre tangos y recuerdos, Raúl Henao habla de sus aventuras literarias, de sus libros (como Combate del carnaval y la cuaresma, Sol negro, El virrey de los espejos, Una alberca en la luna); del misticismo, el surrealismo, la ironía y el erotismo que se asoman en sus versos; de sus tesoros (los libros); y de una vida que, a pesar de los avatares, le ha alcanzado para escribir intensamente y dejar una obra que hoy es imprescindible para la poesía en Medellín y Colombia.
“La importancia de Raúl para la poesía en Medellín y Colombia tiene varios puntos. Creo que es un hombre de bagaje y recorrido, tiene experiencia y ha dedicado toda su vida a la poesía. A ello le podemos sumar trece libros que tiene, entre poesía y ensayo, y una gran cantidad de antologías alrededor del mundo; por ejemplo, ha estado en antologías en Puerto Rico, Hawái, Londres, Brasil, Suecia, México. Me parece que es un hombre contestatario frente a la institucionalidad y a la burocracia que esta representa, y eso lo ha llevado a ser un hombre libre frente a cierta esclavitud generada por el capitalismo. ¿Y qué es lo que más necesita un artista? Tiempo, y eso es lo que ha tenido Raúl, para profundizar en las lecturas de su gusto y en la escritura que lo identifica”
El documental está disponible en YouTube y, para estos días de cuarentena, qué mejor manera de encontrarse con una obra de “gran belleza, llena de metáforas, lugares desconocidos y extraños, de estampas de luz y aprendizajes de la vida misma”, como comenta Gómez.
“Allí podremos encontrar sabiduría, erotismo, diversión, ironía, pero también hay poemas de una gran sencillez y delicadeza. Yo creo que Raúl es uno de nuestros poetas más sinceros y dedicados, su oficio no ennoblece y le da el valor que se merece”, concluye Gómez.
Tomado de Blog: https://lateralesnews.com/
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